miércoles, 11 de mayo de 2011

Soneto a Kika


En tiempo de consternación social y política, desde Asia hasta tu barrio, nada mejor que escribirle un soneto al perro de tu corazón. Seguí mi ejemplo.

Acá va:


SONETO A KIKA

Hay en tu ser pompón un atisbo de cordero
Que se transmuta a saltos de liebre o de coneja.
Por jugar vas a morder, y vibrarás la queja
De cazadora espléndida en tarascón certero

Pero tu alma es de azúcar y de beso primero,
De novias esperando su cariño en la reja.
Montaña desmayada que se vuelve madeja
De lana. Se autoteje y es suéter compañero.

Y es rosa y algodón y potrero y alegría
Y rugido de violín, borbotón de cantata,
Ternura porque sí, conmoción que no se explica.

La pureza del mundo si es que la tuvo un día,
El crujido de un azul muñeco de hojalata
Y tu niño que vuelve a caminar. Eso es Kika.



¡Qué alegría le va a dar este soneto cuando aprenda a leer!