martes, 27 de mayo de 2014

Para ella y para vos


¿Cómo te consuelo ahora, en tu duelo?

Ruptura se acumula tras ruptura.

Queremos rebelarnos y es locura.

Seguir aquí es poder pender de un pelo.

 

Traspaso la distancia, rasgo el velo,

siento el regusto de tu pena pura,

y de verde y de negro, soy ternura.

Donde no estoy, estoy, me doy, me cuelo.

 

Y si acaso mi abrazo da tristeza,

lo reservo. Estará cuando lo pidas

como en aquellos días más felices.

 

Hay un tiempo sin tiempo que no empieza

ni termina. Sentencias escondidas
 
de Dios nos juntan en sus directrices.




Citando a Lope


“No hay ingratitud hermosa” (Lope de Vega, “El Perro del Hortelano”)

 

 

Belleza insustancial, ingratitud

esmerada, la suavidad mentida

de tu preciosa voz ya no convida

como hizo antes. Brindo a tu salud

 

en esta casa que como un ataúd

custodia aquello que quedó sin vida.

Tu paso por aquí, mi tonta herida,

deseos confabulados en alud.

 

Para ignorarme así tendrás excusas,

fácil se justifica el abandono.

¿Seré quien tire la primera piedra?

 

Resuenan melodías inconclusas.

Pesa más el cariño que el encono.

Se impone a lo demás, como una hiedra.
 
 
 
 

lunes, 26 de mayo de 2014

Vuelvo


Vuelvo con miedo a la que fue mi casa

porque al partir dejé la puerta abierta.

Mi luz dormida y mi pasión despierta

tendieron una trampa. A veces pasa.

 

Tal vez en ella, como en tabla rasa

talla el fantasma que cruzó esa puerta

una palabra de fragancia incierta

que alterará mi sueño y mi argamasa.

 

Pero vuelvo a buscarme. Si me encuentro

voy a quemar incienso de armonía

o mirra en el cristal más transparente.

 

Aspiraré el perfume hasta mi centro.

Me cantaré una simple melodía
 
y el espectro se irá. Paz a mi frente.


domingo, 25 de mayo de 2014

Adiós


Adiós, adiós, ¡ay, vida paralela!

Adiós a este dolor de aquí parirse solo.

Adiós altar donde ya no me inmolo

porque me voy. Adiós noches en vela.

 

Calles del Norte, adiós, mala tutela

sobre mí mismo. Adiós al autodolo.

Vereda angosta, adiós, maligno polo,

cinta de penas que este adiós cincela.

 

Adiós también a la ilusión quebrada.

Adiós resaca de una fiesta trunca.

Adiós, imposible. No somos dos.

 

Adiós lapachos hoy sin flor ni nada

temblando a Dios tan lejos, más que nunca.
 
Yo soy del Sur. Debo volver. Adiós.



Con la maleta abierta


Dijiste que nunca te casarías.

Ni mascota ni hijos ni marido.

Yo no pude escuchar. Fue mi descuido.

Perro huérfano voy por faltas mías.

 

También se te escapó que me querías.

No del todo ni tanto o como pido.

Yo no pude esperar. Fue mi descuido.

Quizá debí regar lo que sentías

 

y no quedar así, de manos pobres

cruzadas en plegaria silenciada

con todas las ausencias por delante.

 

Parto. Las cartas mías y los sobres

vienen también. Y vos como si nada
 
me das tu abrazo frío. Ya es bastante.




viernes, 23 de mayo de 2014

Hipérbole


Traigo mis cuatro talones de Aquiles

al aire en la estampida. Soy igual

que nieve derretida. Un animal

con miedo y sin instinto. Yo entre miles

 

de tigres y jirafas y mandriles

huyendo del incendio. Un arenal

profundo, movedizo y sin final

me raspa los costados. Sin candiles

 

vendrá la noche oscura tras el fuego.

Nadie sabrá palabras. Un gruñido

de dolor espantado y poco más.

 

Esto es lo que me espera y así llego.

Soterrada amapola, ciervo herido,
 
después de la hecatombe, ¿adónde vas?


jueves, 22 de mayo de 2014

Escape


“¿Me puedo escapar?”, dijiste. Saludo

que me muerde la entraña recordar.

Me avergüenza. Me impide respirar.

Me transporto al momento. No me ayudo.

 

Aún entonces mi ávida boca pudo

besarte el cuello antes de verte andar.

Era dulce tu modo de matar.

Nada quiere en tu ser parecer rudo.

 

Tu extrema suavidad es mi peligro,

ese grito que pide protección

amagado en el pozo de tus ojos.

 

Ya no vuelvo a caer. No me denigro.

No le busco al silencio tu canción.
 
Escapo también, contra mis antojos.



miércoles, 21 de mayo de 2014

Tu mejor versión


Traías sabor de compota de pera

hervida en fiestas de alguna prisión,

pena escombrosa de demolición

y una defensa oscura y altanera.

 

Y yo te captaba de tal manera

que en vos veía clara tu mejor versión.

Hacértela parir fue mi ilusión.

Gozarla junto a vos fue mi quimera.

 

Veía detrás de los negros abanicos

luciérnagas de azahar, árbol sensible,

un violín afinado y en desuso

 
que si luego sonó, me volvió añicos

de una trituración nada ostensible.
 
No hubo sangre ni escándalo ni abuso.
 
 
 
 

miércoles, 14 de mayo de 2014

Invocación


Hay prueba de vestuario. Los actores

habitan por primera vez sus trajes.

Ríen y alborotan. Los personajes

encuentran otra piel en los colores

 

suntuosos de las telas. Los rumores

son espontáneos y jocosos. Pajes

y condes pavonean sus pelajes.

Se azuzan como grillos entre flores.

 

Hay alguien que se atasca en su zapato.

Hay otro que se aparta enfurruñado

por algo que le viene a contramano.

 

Las damas se embellecen en brocato

y miriñaque. Lope es invocado.
 
¡Resurja en “El perro del hortelano”!



martes, 13 de mayo de 2014

Pasado el temporal


Fin de ciclo. Las naranjas amargas

cayeron tras el golpe de tormenta.

Su navideña dispersión intenta

un sendero distinto. Duras cargas

 

derivan sobre el mar donde aletargas

tus barquitos de cayote y de menta.

La lluvia sigue con ritmo de imprenta

y deja todo escrito. Sombras largas

 

esperan nuevo sol para mostrarse

y argumentar contrastes coloridos

acariciando el pasto y su perfume.

 

Lo que pudo enfermar, puede curarse.

Memorias abrumadas van a olvidos.
 
Pasado el temporal, nadie presume.



lunes, 12 de mayo de 2014

Tercetos a modo de pañuelito que se agita


La soga maltratada al fin se corta

y me queda por último consuelo

saber cómo de mí nada te importa.

 

Las canas agregadas a mi pelo

escapan al sentido de tu vista

lo mismo que mi llanto y mi desvelo.

 

En la hora de partir, que Dios me asista

 y quede Dios con vos, como deseo.

Que nunca a la intemperie te desvista.

 

Feliz, como de niño en el recreo

quiero pensarte, para andar liviano

el empinado azar que ante mí veo.

 

Te luzcan, cuando yo esté bien lejano,

violetas y esmeraldas en el cuello,

frutillas y bombones en la mano

 

y el Arte en que lo bello con lo bello

pueden pasar del mundo y sus miserias.

No veas nada, más que tu destello

 

multiplicado por sus cien histerias

como por las facetas de un diamante.

Huya tu luz siempre a las cosas serias

 

y vuelvas a encontrar dulce, gigante,

abierto castillo de fantasía.

Cada paso que des hacia adelante

 

tenga la gracia de tu rosa fría,

un aroma de orégano salvaje

y el esplendor de excelsa monarquía

 

que va bien a tu garbo y a tu traje

de ser que no es de aquí, sino del libro

donde todo es tu imperio y yo era paje.

 
Hoy me caí del cuento, porque vibro.





Inundación casera


Con afectados pasos de ballet

ya te vas alejando de mi vida,

escena que te ampara y me descuida.

No llega a lluvia. Es como un bidet

 

abierto con tal fuerza que el parquet

de mi cuarto se inunda. Percudida

queda la madera, y aterida

mi carita en la foto de un carnet,

 

la licencia para no conducir.

¿Después? Chocarán Saturno y la Tierra

o no. Hogar y familia entretanto

 

vendrán a cuento si es para zurcir

cielos rasgados. Saltará mi perra
 
festejando el entierro del quebranto.



sábado, 10 de mayo de 2014

Fecha de regreso


Anduve tan distraído

que así te solté la mano,

sin querer ni darme cuenta.

Hoy pido que me rescates.

 

Ha sido como ese sueño

en que andamos por la calle

completamente desnudos

y lo descubrimos tarde.

 

Entonces buscamos ropa

implorando que los otros

no nos hieran de sus ojos.

Queremos ser transparentes.

 

Apenas unas chancletas

en los pies, y va estampado

en la piel por todo atuendo

el signo de la vergüenza.

 

La mente que se acelera

y el cuerpo que no responde.

La casa que queda lejos

y el despertar que no llega.

 

Ha sido perder a Dios

como caen las monedas

por el bolsillo agujereado

de unos viejos pantalones.

 

Ha sido arribar muy tarde

a citas no concertadas.

Ha sido sembrar sonrisas

en la máscara sin labios.

 

Ha sido tomar el tubo

-último de los teléfonos

públicos- y rebuscar

esa moneda perdida.

 

Ha sido encontrar la voz

y quedarse sin palabras.

Ha sido dejarte a Vos

y atragantarse en vacío.

 

Y llamar y que no atiendan.

Y explicar y que no entiendan.

Sólo lograr que se ofendan

 porque sí. O por las dudas.

 

Si hoy alzo al cielo los ojos

encuentro el techo muy bajo

todavía. Las arañas esquineras

esperan, como es costumbre.

 

Pero tengo la maleta

ansiosa de abrir el vientre

a lo que deba llevarme.

Tengo fecha de regreso.

 

Y estarán nuestras imágenes

más inspiradas que nunca.

Postergarán el reproche.

Me verán abrir la puerta.

 

No preguntan, porque saben.

No alborotan, porque sienten.

No gritan si ando desnudo

y me visten cuando duermo.

 

Porque los sueños que vienen

ya no pueden ser los mismos.
 
 
 
 
 

viernes, 9 de mayo de 2014

Quedar pagando


Quedar pagando con vos es deporte.

Hoy tontamente requerí consejo

y me diste tu cara como espejo

indiferente y roto. Tengo un corte

 

por asomarme al vidrio. ¿Hay quien conforte

 la roja soledad de mi entrecejo?

Inútil, pobre, desolado y viejo

me hacés sentir. Abono así el importe

 

que le cabe a una abstrusa fantasía

desmantelada, ni siquiera mía,

mas del otoño que siguió al verano

 

como es justo, deseable y natural.

Esta derrota no me viene mal.
 
Así aprendo a no andar a contramano.


Despido la ilusión más dolorosa


Despido la ilusión más dolorosa

como si fuera un ramo de alegría

que se marchita. Tonta es la manía

que ama la pena si la encuentra hermosa.

 

Despido el llanto, la pasión celosa,

dulce labor con hilos de agonía,

y aunque mi duende malo no quería

puedo sentir que estoy en otra cosa.

 

El duende insistirá. Vendrá a buscarme.

Afinará su rostro en la ternura

y me dirá que es parte de mi casa

 

no con palabras, sólo con mirarme

como quien ya conoce mi locura
 
y sabe provocarla. A ver qué pasa.

 

miércoles, 7 de mayo de 2014

Mudanza




 
¿Qué fue de ayer a hoy? ¿Por qué mudanza
lo que me atribulaba me da risa?
¿Qué ladrón ha caído en la pesquisa?
¿Cuál es el paso nuevo en esta danza?
 
El intelecto a discernir no alcanza
si rezó el rezo clave en esta misa
ni adónde dirigirse y con qué prisa
si es cierto al fin que el carromato avanza.
 
No sabe si pensar que hay un progreso
o atribuir a simple ciclotimia
este sentir el aire nuevamente
 
pasar a los pulmones como un beso
sin temblores ni espasmos en su alquimia,
 
desatando los nudos de mi frente.

martes, 6 de mayo de 2014

El infierno es una mujer fumando


El infierno es una mujer fumando.
Sentada en el parque, lentes oscuros.
De sus labios algo ajados y duros
el humo abundante sale apestando


el verde cercano. Quizá pensando
en seres ingratos, rencores puros
como si de siempre por tan maduros
a su piel de crema van asomando.


El pelo rubio de tintura opaca
resiste la brisa sin inmutarse.
Brota amargura. No está nada flaca,


grasa y orgullo vinieron a quedarse.
Algo distraída sorbe un café
Y masculla algo. No adivino qué.


lunes, 5 de mayo de 2014

A Lope de Vega


Sí supieras que a mí el amor me llega

como un niño tomado de tu mano

darías en reír, con ese gesto sano

que ni viejo perdías, Lope de Vega.

 

¡Quién tuviera tus dotes y tu entrega

para querer en modo alegre y llano!

Antes somos perro del hortelano:

mal cuida, poco come, mucho ruega

 

para entregarse al pie de lo imposible

que con su paso adusto nos aplasta

en este suelo de hoy, tan enlodado.

 

Fuiste y nos serás siempre tan querible

que ante tu verso no decimos “¡Basta!”
 
y volvemos al juego endemoniado.



 http://www.lagaceta.com.ar/nota/589054/ocio-espectaculos/tenemos-relacion-franco-deterioro-palabra.html



En la foto: Mariano Mazzei como Lope en "Quien lo probó lo sabe"


En la foto: primer ensayo del Elenco Estable de la Provincia de Tucumán en el escenario del Teatro San Martín, donde se estrenará "El perro del hortelano" de Lope de Vega el 24 de mayo de 2014 (Gala Patria)

Lectura matutina


Buscarás tu metáfora o palabra de peso,

un puñal que te place si te descorazona,

y como a la distraída tantearás la zona,

al clavarla serás perro cuando entierra un hueso.

 

Quizás él te dirá que no es hora para eso

mientras yo te diría que no es ésa la persona

aun si le diste título, poder o corona

para horas tiernas con exclusividad de beso.

 

Pero a vos te encanta que rechace tus lecturas

porque así te asegura el espesor necesario

de la separación, donde al fin se respira.

 

Cada cual en su mundo, rumiando sus capturas.

Conviene estar bien lejos del ser estrafalario
 
que cuando hablás te escucha, que cuando estás te mira.

sábado, 3 de mayo de 2014

Celos del libro


Nostalgia siento ahora de cuando un libro abría

y el vendaval de celos en mí se descargaba

como si aquellas letras fueran carne. Apagaba

mi velador lamentando el aire que perdía.

 

También había rulo revuelto y se sentía

de sus ojazos verdes la luz que reposaba

en la ansiedad oscura. Quizá me vigilaba

con sus siete sentidos hasta mientras dormía.

 

Tampoco yo podía leerle algún poema

porque no era su gracia, porque no era su tema,

porque de mí esperaba siempre alguna otra cosa

 

que yo no supe darle, porque no la encontraba

o porque no quería, tanto me molestaba
 
aquella demanda insomne que hoy recuerdo hermosa.