jueves, 28 de junio de 2018

Wittgenstein


Los filósofos exploran
el límite del lenguaje
fabricándose chichones
contra paredes abstrusas.

Solo querías un beso.

¿Un poco pedante? Sí.
¿Eterno angustiado? Sí.
¿Abrupto? ¿Irascible? Sí.
¿Audaz? ¿Admirable? Sí.

A saber si te lo daban.

No pudiéndonos hablar
lo tendremos que callar.
Subimos a ningún sitio
y arrojamos la escalera.

En una playa noruega.

La claridad es un fin
y tus ojos lo sabían.
Hablaban lo que callaban
expulsados de la lógica.

Donde hay pelo no hay certeza.





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